Calle Cabeza

Calle Cabeza

Post n°77 pubblicato il 02 Marzo 2009 da viajera67

Madrid, junio del 1999.

 Calle Cabeza.

Esta noche he soñado che despertaba contigo, en la calle Cabeza. Me decías “Espérame que vuelvo pronto” y volvías con sonrisa, pitillos, café y bandeja. Te asomabas a la ventana y me mirabas, “te quiero, no sabes cuánto…” Entonces acariciaba tu cara, tu pelo, tu pecho, y tocaba algo más que tu cuerpo. No sé: era algo más. Te miraba a los ojos. Era demasiado. Luego me sorprendía mirándote mientras te ponías despacio la ropa para ir al curro; te duchabas, volvías a la cama mojada y sonriente. Deseaba una y otra vez entrar y quedarme en vos, parar el tiempo. Me explotaba el cuerpo, la cabeza; el mismo día me explotaba encima.

“Te llamo luego”, me decías, lanzándome el último beso antes de irte. Me quedaba en tu cama, me fumaba otro pitillo. Era inmensamente feliz. Entonces bajaba llevándome tu sabor bajo la ducha, en la cama y la calle. Sonaba el teléfono: “hola, piccola,  ¿qué haces luego? "Nada, tengo ganas de verte". Y  anulaba todo para perderme en vos. A veces te encontraba casualmente por la calle, o en la filmo, o cuando ibas de compra. Entonces te abrazaba entre la gente, me invitabas a tu casa o yo a la mía, y me sorprendía una y otra vez en la cama con vos. Me despierto en mi casa, abro los ojos. Ya te has ido, y no duermes conmigo. Me preparo un café, me fumo un pitillo, leo un libro que acabo de comprarme. Y pienso en ti. No sé como, no sé por qué, me despierto y pienso en ti. No te llamo ni me llamas, no te encuentro ni siquiera por la calle. Tu ojos, tus manos. Te llamo luego, me decías. Y el teléfono sonaba y explotaba en mi cuerpo “hola, piccola?Por dònde andas?”.  Era un sueño. Uno de estos sueños que la gente sueña y que nunca vive. Vivirlos sería demasiao.  

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